Ata: un cóctel que ata culturas, sentidos y emociones

Hay bebidas que refrescan. Otras que embriagan. Y algunas, como el Ata, que logran algo más: contar una historia. Este cóctel es un puente entre el arte japonés del shibari y la pasión ecuatoriana por crear un ron que enamore paladares. Un viaje sensorial en el que cada ingrediente, cada textura y cada aroma están “atados” con intención y belleza.

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El origen del shibari: arte en cuerdas

El shibari nació en Japón durante el período Edo (1603–1868), inspirado en antiguas técnicas de atadura llamadas Hojojutsu, utilizadas por los samuráis para inmovilizar prisioneros. Con el tiempo, esta práctica fue transformándose: las cuerdas dejaron de ser un instrumento de restricción y se convirtieron en un medio artístico.

En el shibari contemporáneo, cada nudo y cada trazo de cuerda se colocan con precisión para realzar la figura del cuerpo y transmitir una narrativa visual. No es fuerza, es cuidado; no es aprisionar, es enmarcar. Es la tensión perfecta entre estética y emoción.

Ese mismo principio fue la chispa para crear el Ata: una bebida que envuelve sabores como las cuerdas envuelven formas, con un balance entre intensidad y suavidad, fuerza y sutileza.

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El concepto detrás del cóctel

El Ata no es un cóctel recargado ni ostentoso. Su encanto está en su simpleza bien pensada: pocos ingredientes, pero unidos con un hilo invisible de coherencia y carácter.

La base es un tomate riñón maduro, triturado y filtrado para obtener un jugo sedoso. A este se le suma el jugo fresco de lima limón, que despierta el paladar con su acidez brillante. Una pizca de sal actúa como el nudo que sujeta todo: resalta lo dulce del tomate, equilibra la acidez y prepara el escenario para la entrada estelar del ron Merry Boys.

Con sus notas profundas y envolventes, nuestro ron abraza la mezcla y le da esa calidez que lo hace único. El resultado es un cóctel de color rojo intenso, fresco, aromático y con un toque salino que sorprende.

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Receta del Cóctel Ata

Ingredientes:

• 1 tomate riñón maduro
• 1 lima limón
• 1 pizca de sal
• 2 oz de ron Merry Boys
• Hielo (solo para agitar en coctelera)

Preparación:

1. Tritura el tomate y pásalo por un tamiz para obtener un jugo suave.
2. Exprime la lima limón y añade su jugo al tomate.
3. Incorpora una pizca de sal y las 2 oz de ron Merry Boys.
4. Coloca todos los ingredientes en una coctelera junto con hielo.
5. Agita enérgicamente durante 40 segundos para enfriar e integrar sabores.
6. Sirve en un recipiente de cerámica, sin hielo, para conservar su pureza y temperatura.

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Un homenaje líquido al arte de atar

Así como en el shibari cada cuerda se coloca con intención, en el Ata cada ingrediente tiene su papel. El tomate aporta cuerpo y dulzor, la lima limón es la chispa, la sal equilibra y el ron es el abrazo final que lo une todo.

Este cóctel está pensado para disfrutarse en un momento especial: un atardecer frente al mar, una charla íntima o una noche en la que quieras sorprender con algo diferente.

En Merry Boys creemos que las bebidas no solo se beben: se sienten, se viven y se recuerdan. El Ata es una invitación a atar tus sentidos a una experiencia que cruza fronteras, mezcla tradiciones y celebra la creatividad.